En 1780, John Jameson estableció la forma de fabricar whiskey irlandés y hemos empleado esa técnica con orgullo desde entonces.
Como puedes imaginar, la producción de un whiskey irlandés mezclado que se ha disfrutado durante más de dos años implica mucho trabajo. Pero no te preocupes, ya que hemos destilado más de 200 años de valentía, artesanía y una apreciación colectiva de su sabor en un único producto. Aquí está el secreto que se esconde tras nuestra suavidad característica: nuestro proceso y nuestra gente.